lunes, 18 de octubre de 2010

Apuntes de la charlas "Cine y Pop en Latinoamérica"

Fruno Bulax, moderador de la Mesa Redonda "Cine y Pop en Latinoamérica" que se celebró la semana pasada en la Casa de América nos ha cedido los apuntes que utilizó y y compartió con los demás ponentes.
insistimos, son sólo apuntes, pero creemos interesante compartirlo por la cantidad de información que ofrece. 



URUGUAY

La industria cinematográfica uruguaya es prácticamente inexistente, aunque su historia es tan antigua como la de cualquier otro país (se considera su comienzo en 1898 con “Carrera de bicicletas en el velódromo de Arroyo Seco”, de Félix Oliver), y que cuenta con cine costumbrista mudo a comienzos de siglo (“El pequeño héroe del arroyo de oro”, “El desembarco de los 33 orientales”, “Pepita la pistolera”, “Mataron a Venancio Flores”...), experimentos panfletarios  . Desde entonces y hasta hoy, se han estrenado unos cincuenta largometrajes. En lo que respecta a la representación de la cultura popular, sólo se pueden destacar dos largometrajes: “El Chevrolé” (Leonardo Ricagni, 1998), la primera película “moderna” uruguaya, basada en un cuento de un ex-presidiario tupamaro. Cuenta las vicisitudes de un tipo que sale de la cárcel y pretende volver a juntar a su banda, Los Chevrolés. La película tiene un ritmo frenético (es obra de un curtido director de publicidad), y gira en torno a la música: su momento álgido tiene lugar durante una fiesta religiosa uruguaya, Iemanjá, una fiesta con procesiones y batukadas. Y “La casa muda” (Gustavo Hernández), el primer largometraje de terror hecho allí, rodado en tiempo real y sin cortes. Un experimento no por oscuro y truculento menos eminentemente pop, recién estrenado en Sitges este fin de semana (con una fría y generalmente acogida).
- Water Tournier, maestro del cine de animación en stop-motion contemporáneo (“Tatitos”, la serie Tonky y otros amigos, “Queremos vivir” o “Vacaciones caribeñas”).
- Ricardo Islas, director de culto, películas de terror y recientemente gore de producción yanqui (“Posesión”, “Crowley”, “La trampa”, “Plenilunio”, “Mala sangre”, “El día de los muertos”, “Zombie farm”...)
- También destacar el festival de cine Montevideo Fantástico (desde 2006), cuna del nuevo terror y fantástico, gore, etc., que se está produciendo por la zona.


PARAGUAY
De los años 20 datan los primeros experimentos cinematográficos paraguayos, generalmente documentales sobre la cultura y los modos de vida locales (ya se sabe: escenas de la vida cotidiana, desfiles y tomas urbanas), como “Alma paraguaya” o “La catástrofe de Encarn ación”, ambas de Hipólito Jorge Carrón. Otra figura destacada de la documentación audiovisual es Juan Max Boettner, figura local, médico, compositor (autor del propio Himno Nacional) y cineasta aficionado, quien pasa por ser el pionero, al menos en Latinoamérica de la filmación de operaciones quirúrgicas (1947).
Posteriormente, prácticamente no existe presencia paraguaya en el cine durante la dictadura de Alfredo Stroessner (1954 - 1989) salvo las proyecciones del Noticioso Nacional del dictador, o la película realizada a mayor gloria suya y sobre su victoria en la guerra, “Cerro Corá” (1978), una de esas películas egomaníacas y realizadas por dictadores, que tienen cierto encanto pop. Alto presupuesto, acción, trajes de época, cañonazos, exaltación patriótica, etc.
A partir del auge del video en los años 80, proliferan (como en todas las filmografías) los cortometrajes y películas menores.
No existe por lo tanto prácticamente cine paraguayo, ni demasiada relación con la cultura pop y aquel país.
Lo que sí encontramos es películas extranjeras ambientadas en el Paraguay de la época, como “Los niños del Brasil” (1978) o “Comando Méngüele” (1988), que cuentan la caza de nazis y la búsqueda del Doctor Mengele llevada a cabo por el ejército americano en aquellas tierras (sobre la novela de Ira Levin), una vez que Mengele se exilió en Paraguay. ¿Cazar de nazis es pop?
“One man’s war” (Un hombre en guerra), telefilm de 1991 protagonizado por Anthony Hopkins, es un biopic sobre el dictador Stroessner.
Tambien simpática y bastante pop es la comedia romántica “Moon over Parador” (Presidente por accidente) protagonizada por Richard Dreyfuss, donde Parador es un país exótico inventado, mezcla de Paraguay y Ecuador.
Augusto Roa Bastos, el más conocido autor local, escribió algunos guiones, y varios directores argentinos rodaron parcial o totalmente en Paraguay (por motivos económicos), como el caso de Armando Bo, que rodó allí en los 60s varias de sus obras más conocidas protagonizadas por su musa Isabel Sarli (“Carne”, “Poseída”).
Para finalizar, también por motivos económicos, varias películas extranjeras se han rodado en suelo paraguayo: “Moonraker”.


VENEZUELA


Cine mudo desde 1897 (“Célebre especialista sacando muelas en el Gran Hotel Europa” y “Muchachos bañándose en la laguna de Maracaibo”, de Manuel Trujillo Durán), y otros cortos documentales sociológicos durante los años venideros. “EFPEUM (Estructura funcional para encontrarse uno mismo)” de Mauricio Odremán Nieto (1965), se considera la primera película de ciencia-ficción venezolana. Fruto de la acepción del realismo mágico y el surrealismo como elementos de la cultura pop venezolana. Blanco y negro, planos, iluminación y sonidos vanguardistas y futuristas, imágenes oníricas, actuaciones musicales de bandas pop de la época, crítica social, existencialismo.
En los setenta se produce un boom cinematográfico, que da comienzo al llamado Nuevo Cine Venezolano, y por primera vez el cine autóctono comienza a obtener éxitos de taquilla en su país, aunque coincide con una crisis económica, por lo tanto las películas no son tantas.
Ya en los noventa se producen una serie de películas d e acción y delincuencia (a rebufo tardío del éxito del cine quinqui español o de delincuentes callejeros americanos), obra del director José Ramón Novoa, como la premiada (y nominada al Goya entre otras cosas) “Sicario” (1994) “Huelepega: la ley de la calle” (1997) o “Garimpeiros” (1999). Otros éxitos reciente de este tipo de historias de acción y delincuencia, inspiradas en la realidad del país (el más rico del sur del continente, pero con un enorme índice de pobreza al mismo tiempo) son “Punto y raya” (2004, Elia Schneider) o “Secuestro express” (2005, Jonathan Jakubowicz).
Destacar que Venezuela es el máximo exponente de la telenovela (aunque la primera sea mexicana, “Senda prohibida”, de 1958), producto de incalculable impacto cultural.


CHILE
Origen en los años 10, con películas cortas mudas que pretendían retratar el presente (Salvador Giambastiani: “Recuerdos del mineral del Teniente”). En los años 30, una corporación de fomento del cine decide no sólo p  roducir películas propias, sino co-producir cine junto con Inglaterra o India. El cine decae en los 50, y en los 60 renace con la creación de un par de departamentos cinematográficos oficiales.
El cine chileno es escaso (hasta la época reciente), y no destaca especialmente por su carácter colorista o pop. Exceso de costumbrismo, historicismo (pesa el drama de la dictadura militar post-Salvador Allende) y si acaso vanguardia. Destacan películas clásicas como “El Chacal de Nahueltoro” (Miguel Littín, 1969), la historia real del asesino de toda su familia, considerada la mejor película chilena; “Julio comienza en Julio” (Silvio Caiozzi, 1979), película de iniciación sexual y de choque entre clases, muestra la vida rural de Chile a comienzos del siglo XX; “Caluga o Menta” (1990), conocida también como “El Niki”, es la historia de un grupo de jóvenes marginales, delincuentes juveniles (cine quinqui, de nuevo) durante la transición chilena. Popularizó la frase «La droga es lo peor»; “El cabrero” (2009) espeluznante peli de terror sobre un bulldog ases  ino; “Piotr: una mala traducción” (Martín Seeger, 2010), la única película de la historia rodada en lenguaje inverso, cuna del absurdo; “Tony Manero” (Pablo Larraín, 2008), estupenda comedia ambietada en los 50 sobre un tipo obsesionado con “Fiebre del sábado noche”; “Curriculum” (Patricio Valladares, 2008), gore salvaje; “Mitos y Leyendas” (José Luis Guridi, 2010), cine fantástico basado en un juego de rol;
- Alejandro Jodorowsky, nacido en Chile. Dramaturgo, cineasta, escritor, guionista de cómic (Moebius), dibujante, etc., aunque su producción es mexicana.
- Condorito, personaje de comic de Pepo (desde 1949) serie y corto en 3D.


CUBA
1897: “Partida de cartas”, “El tren”, “El regador y el muchacho” y “El sombrero cómico”. Cine de revisionismo histórico en los años 10. Hasta 1959, se rodaron 80 películas en Cuba. Entonces Castro fund  a el Instituto Cubano del Arte y la Industria Cinematográficos. Entre el 59 y el 69, época dorada del cine en Cuba.
“Fresa y Chocolate” (Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío, 1993), la película más famosa del cine cubano. “Elpidio Valdés” (1974), primera peli cubana de dibujos animados. “Viva Cuba” (2000), primera película infantil cubana. En general, todo el cine cubano es de exaltación del régimen, conservador, costumbrista, etc., y sobre todo muy muy escaso.
Lo más destacado de la relación entre el cine, la cultura popular y Cuba, son las mil y una versiones que se han hecho de Fidel Castro, en todo tipo de productos. Se le menciona en “El apartamento”, y hasta es considerado un icono popular del pop-art y el lowbrow. Como personaje molesto para EEUU, sus apariciones siempre han sido disipadas, pero el comunismo se ha desvirtuado hasta convertirse en objetivo claro del pop. Destacan los acercamientos curiosos de Oliver Stone, o el discurso de Fidel en “Scarface”.
- El Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana lleva 32 ediciones y goza de gran prestigio.


COLOMBIA
Igualmente, los Hermanos Lumière llevaron el cine ya a Barranquilla o Bucaramanga en 1897, y existen algunas películas de aquella época, aunque los constantes conflictos bélicos han hecho que nunca haya existido una industria cinematográfica rentable en aquel país, siempre sumido en crisis económica.
Destacar el “cine de la pornomiseria”, que se valía de la pobreza y la miseria humana para hacer dinero y conseguir reconocimiento internac  ional. La intención no era criticar el cine que relataba la realidad sino señalar a aquellos realizadores que, con afán oportunista y escaso compromiso social, se aventuraban a filmar escenas sensacionalistas que eran apreciadas por ciertos sectores del público europeo. Una de las películas más atacadas des  de esta perspectiva fue “Gamin” (1978), de Ciro Durán, un documental sobre los niños de la calle que además de hacer tomas típicas de la pobreza en la calle sin una investigación de campo seria, se valía de la puesta en escena para recrear situaciones como la de niños robando radios de automóviles. Quienes encabezaron la crítica contra esta forma de hacer cine fueron los integrantes del autodenominado Grupo de Cali los cineastas Carlos Mayolo y Luis Ospina que realizaron el documental “Agarrando pueblo” donde hacían una sátira de la pornomiseria. *Un gamín es un niño pobre que habita en las calles (proviene de un término francés que significa “pequeño muchacho ayudante de obreros”).
A finales del siglo XX, el cine colombiano pierde toda la financiación pública, y difícilmente salen adelante proyectos, destacando apenas “La estrategia del caracol” (1993, Sergio Cabrera), sobre la brecha entre ricos y pobres y las penurias de una familia de bajos ingresos de Bogotá.
- Fernando LaVerde, pionero del stop-motion colombiano (“La pobre viejecita”, 1978;  “Cristóbal Colón”, 1982; “Martín Fierro”, 1989). Industria del cine de animación asentada en la actualidad.
- Cine fantástico cubano: Cautivo del más allá (1968), Karla contra los Jaguares (1974), Los jaguares contra el invasor misterioso (1975), La llamada del sexo (1976), Funeral siniestro (1977), Área maldita (1980), 27 horas con la muerte (1981), Contaminación Peligro Mortal (Alien llega a la tierra) (1982), La noche infernal (1982), Pura sangre (1982), Carne de tu carne (1983), Triángulo de oro (La isla fantasma) (1984), Extraña regresión (1985), La boda del acordeonista (1986), La mansión de Araucaíma (1986), Profundo (1987), Milagro en Roma (1988), La mágica aventura de Oscar (2001), Los niños invisibles (2001), Al final del espectro (2006), “El Man” (2010, versión autóctona/disparatada de “Kick-ass”)

ARGENTINA
- Titanes en el ring (1962-1988), con dos películas “Titanes en el ring” (1973) y “Titanes en el ring contraataca” (1984): Martín Karadagián, el Maradona del match-as-catch-can.
- Películas de los 50 protagonizadas por Carlos Gardel.
- El destape: Armando Bó e Isabel Sarli
- Exploitation y terror: Emilio Vieyra (“Extraña invasión”, “Sangre de vírgenes”, “Correccional de mujeres”, “La bestia desnuda”...), comparado con Ed Wood.

MEXICO


- Época dorada: 1936-1957, hasta la muerte de Pedro Infante. Jorge Negrete. Silvia Pinal.
- Mario Moreno Cantinflas, Tin Tan, Capulina (Germán Valdés, actor, cantante y doblador de películas Disney, hermano de Don Ramón, cine infantil...), (Gaspar Henaine, "el rey del humorismo blanco") (posteriormente, influencia enorme en la televisión infantil mexicana, Chespirito, Chavo, etc.)
- Miguel M. Delgado, director de más de 100 películas, sobre todo comedietas de Cantinflas, Tin Tan o Capulina, pero también todo tipo de géneros, fantástico, terror, WIP movies, etc. (comparable a Roger Corman)
- Luis Buñuel etapa mexicana: “Los olvidados” (1950, una de las dos únicas películas consideradas Patrimonio de la Humanidad, junto a “Metrópolis”) hasta “El ángel exterminador” (1962)
- Fernando Méndez, empezó trabajando en producciones americanas como “Maniac” o “Marijuana: weed with roots in Hell”, y llevó el cine fantástico a México (“Calaveras del terror” (1943), “Ladrón de cadáveres” (1956), “El vampiro” (1957)
- Santo y cine de luchadores (Blue Demon, Mil Máscaras, Fray Tormenta, Neutrón, Zovek, Kaliman... seriales, “El charro de las calaveras”..). Monstruos, alienígenas, delincuentes. Etapa tintinesca, mediocridad.
- Destacar directores como Alfredo B. Crevenna (vampiros, terror psicológico, luego Neutrón y luego Santo de principio a fin) o René Cardona Sr. y Jr.
- Boris Karloff tuvo también etapa mexicana.
- “Cine de ficheras” (años setenta y primeros ochenta), destape, albures (dobles sentidos), inspirado en la comedieta italiana. Picante, generalmente no demasiado explícito. Destacar a Grace Renat. De “Las ficheras” hasta “Las computadoras”.
- “La nave de los monstruos” (Rogelio A. González, 1959)
- “Alucarda” (Juan López Moctezuma, 1975)
- Alejandro Jodorowsky (“El topo”)
- 80s: Cine de acción y violencia (Alfredo Gurrola, “Las águilas no cazan moscas”), Narco Cine mexicano, a raíz de “La virgen de los sicarios” o “Ciudad de dios”.
- En general, siempre, cine como “espectáculo de variedades” (¿).


BRASIL


- Oscarito, cómico brasileño, exploit del cine americano slapstick o Hnos. Marx
En los años sesent surge en São Paulo, en el área de Boca de Lixo, el “cine margina”, serie B marginal. En 1968, Rogério Sganzerla rueda “O bandido da Luz Vérmela”, una cinta basada en un la historia real de un criminal infame de la época. El año siguiente, se presentó la impactante “Matou a família e foi ao cinema” (Júlio Bressane). Algunas veces, el cine marginal de este período es denominado “udigrudi”, una bastardización de la palabra inglesa underground.
En los años 70, y asociado a esto, surge la pornochanchada. Como el nombre lo sugiere, eran comedias sexuales, aunque no representaban escenas de sexo explícito. De esta versión brasileira del destape surgen actrices como Helena Ramos, Matilde Mastrangi, Aldine Müller, Sandra Bréa, Nicole Puzzi, Monique Lafond, Nádia Lippi, Patrícia Scalvi, Rossana Ghessa, Zilda Mayo, Zaíra Bueno, Kate Lyra, Vanessa Alves, Meire Vieira, Adele Fátima, Marta Anderson... Y sobre todo Sónia Braga, popular artista que se hizo internacional tras su paso por este movimiento.
La serie B mexicana surge durante un periodo de dictadura, pese a la presión de la censura, pues ésta era más política que sexual o contra la violencia. Además, como suele pasar, se impuso una normativa para fomentar el cine patrio, que propició que los propios responsables de las salas de cine se liaran a rodar como locos para poder estrenar también películas comerciales, y así hay tanto trash brasileño de esta época que es para  no creérselo.
De este movimiento destacan dos documentales que narran el auge de la pornochanchada y la serie B brasileña: “Brazil: Cinema, Sex and the Generals” (1985) y “Beyond Citizen Kane” (1993).
- José Mojica Marins - Zé do Caixao, icono pop del cine de terror psicológico. Ambiente rural, Freud, escenas oníricas, y entre todo ello el personaje de Zé do Caixao/Coffin Joe, un barbas con uñas largas y sombrero de copa que aterroriza las aldeas.
- “Os Trapalhoes (“Os Trapalhoes na guerra dos planetas” (1978)
- Xuxa (“Amor, estranho amor” (la película prohibida de Xuxa, que aborda la pederastia), "A Princesa Xuxa e Os Trapalhões", “SuperXuxa”)

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